lunes, 30 de marzo de 2020

El Periodismo digital y las emociones la otra cara de la noticia.


Autora: Rita Salas V.







Con la llegada de las redes sociales, el periodismo ha sufrido una transformación desde su propia génesis, convirtiéndose en una herramienta de información y de desinformación, es decir las dos caras de la misma moneda, por lo que su adaptación a la forma digital ha sido un desenlace inminente. 

Por ello, el profesional de la información, el cual a partir de ahora denominaremos “periodista digital”  ha tenido que hacer un buen uso de las herramientas tecnológicas que la globalización y los grandes mercados han creado para ellos, tal es el caso de los teléfonos inteligentes, los cuales constituyen un elemento fundamental para cumplir con el oficio de producir la noticia de forma veraz, efectiva y oportuna.

Son los smartphone, el elemento para un potencial periodismo digital de excelencia, porque a minora la cantidad de cosas que antes se necesitaban para producir la noticia, desde una gran cámara en formato HD, micrófonos con corta viento, luces, trípodes, grabadores de audio y pare usted de contar.

En la actualidad, solo con esos aparatos de alta gama, unos auriculares y el conocimiento sobre el manejo de las aplicaciones adecuadas, tienes una noticia de impacto que te permite un óptimo manejo de la información en tiempo real.

Ahora bien, en estos tiempos donde las personas compran personas, y la preocupación global es tener un mundo mejor, surge una duda ¿cómo hacer esa conjunción perfecta entre el periodismo digital y el manejo de las emociones? sin convertirse en un periodismo de la vieja escuela amarillista.

Como todo en este mundo gracias a las redes sociales es marketing, la información encapsulada en noticias no es la excepción; aumentan los desafíos y el diseño de las estrategias de diferenciación, es ahí en ese preciso embudo de conversión y fidelización del oyente, lector, o llamémoslo consumidor ávido de información con emoción, entra en el ring el STORYTELLING[1].

Entendiéndolo como el arte de contar una historia con la creación y el aprovechamiento de una atmósfera mágica a través del relato. En marketing es una técnica que consiste en conectar con tus usuarios con el mensaje que estás transmitiendo, ya sea a viva voz, por escrito, o a través de una historia con su personaje y su trama.

Solo imaginar por un momento esa nueva composición, de una noticia que transcienda más allá del mero hecho de comunicar las 6 WH (Qué, quién, cómo, dónde, cuándo  y porqué) y que pueda escudriñar esa historia,  no vender la información sino la emoción, sería alcanzar el sueño de poesía de un Gabriel García Márquez.

Claro, aquí filosofando y soñando en una nube de marketing emocional, enmarcándolo en la necesidad del consumidor de comprar emociones y no productos, que el periodista venda el momento no el hecho.

Son paradigmas que la misma dinámica nos llevará a cambiar en algún momento,  ¿cómo hacerlo?  es la gran pregunta y la respuesta es cambiando la óptica y adaptarse al nuevo mundo.

Las plataformas multimedias, las redes sociales y los smartphone dan inmediatez, en un mundo tan cambiante que ya ni puedes medir el impacto de la noticia y es lo que el usuario necesita, acompañado de la calidad de una información que responda a necesidades emocionales.




[1] Diccionario del marketing.com